BENDITA INFANCIA. CORAZÓN GUERRERO
Para los hijos de mis hijos
y todos los niños del mundo.
El niño es primavera, la fuente de agua
viva,
mecido entre los trinos de su bendita
infancia
un mundo donde brilla su inocencia
festiva
y es universo inmenso de ternura y
constancia.
Trompos, canicas, libros, juegos y en
los carritos,
trasladan ilusiones, sus sueños, sus
encantos,
arrullan sus muñecas y corren y sus
gritos
al hogar lo hacen cielo decorado con
cantos.
Y ya son enfermeras, ingenieros,
doctores,
Astronautas volando, haciendo oír su
voz
en todos los espacios de su mundo de
armiño.
Hermosas avecillas de luces y candores
reciban en su día la bendición de Dios
como si el universo también hoy fuera
un niño.
CORAZÓN GUERRERO
Cuando miro
tus manos palpitantes,
luchando cada día
y es la brisa
prendida como luz
en tu sonrisa
alabo tus pisadas,
tus instantes,
tu corazón guerrero.
Son bastantes
obstáculos oscuros.
Tú atizas
el camino
con tu alma. Utilizas
tu corazón
como una flor fragante.
Hay un paisaje
para ti. Su brío
se matiza con trinos
y alboradas
y es un jardín de aromas
y de amor.
Te dejo mis palabras
como un río
muy llenas de ternuras
y tonadas
para tu trajinar
que es una flor.
DE MI ÁLBUM (Quillabamba)
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