martes, 1 de mayo de 2012

"LA PRESENCIA DE DOÑA MARÍA JULIA": DEJA.

REFLEXIONES ÍNTIMAS:
                                             DEJA
                                                         DEJA que tus lágrimas bajen silenciosas por tus mejillas y abran un surco en ellas. Cuando contemples tu rostro, sabrás que esas huellas las produjo el dolor que te brindó la falsía de un cariño.

   Deja que las lágrimas que tus ojos vierten, bajen silenciosas por tus mejillas marchitas y que ellas laven tu rostro, limpiándolo; así como el dolor purifica el alma y el atormentado corazón.

   Deja que en la noche solitaria y fría llegue queda la imagen del recuerdo. Ella te dirá que siempre debes amar y perdonar.

   Así, no habrá espacio en ti para el odio ni el rencor. Esto endurece y marchita el corazón.

   Deja que caminando lentamente, pase el tiempo y llegue el olvido y, con él, la calma que tanto necesita el espíritu cuando es zarandeado por la tribulación y la incomprensión.

   Deja, no importa que la pena anide en tu pecho y éste se llene de sollozos. Así, se desahoga el corazón y, de esta manera, se libera del dolor y la amargura. Concede sincera y generosamente el perdón.-

                              --María Julia LUNA TIRADO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario