DE: "LAS MÁS BELLAS ORACIONES DEL MUNDO"
Oh Señor,
Tú sabes cuál
es el mejor
camino, deja
que se haga
toda Tu
voluntad.
Dame lo que
Tú dispongas,
cuando Tú
dispongas
y cuando lo
dispongas.
como mejor lo
desees
y sea para Tu
mayor honor.
Colócame
donde Tú dispongas
y cuenta
conmigo para todo
lo que
desees.
Estoy a tu
servicio.
Llévame y
tráeme
por el camino
que Tú escojas.
Mira que soy
Tu servidor,
preparado
para todo,
porque no
quiero vivir en
mí, sino en
Ti; ¡Oh! si yo
pudiera
hacerlo digna y
perfectamente.
Thomas de Kempis
VENTANA AL MUNDO:
LA MECA
YO VISITÉ LA CIUDAD PROHIBIDA
Por Ahmad Kamal
Numerosos aventureros no musulmanes han intentado penetrar clandestinamente en esta ciudad, aislada para siempre del resto del mundo por el profeta Mahoma en el año 630 de nuestra era. Muchos abrumados por el calor, volvieron atrás sin pisar su suelo sagrado; otros persistieron, entrando cada vez más hondo en los misterios de la peregrinación, hasta que cometieron algún error en el cumplimiento de los ritos. Descubierto su disfraz de peregrinos, fueron despedazados por los fanáticos o murieron a manos del verdugo. Muy pocos escaparon con vida.
Todos los peregrinos que arriban a La Meca se precipitan a la Mezquita del Santuario. Allí, en el gran patio interior espera la Caaba, una edificación de piedra cubierta con velos, que carece de ventanas y sólo tiene una puerta; es "el edificio más antiguo de la Tierra, el templo junto al cual Adán oró, desconsolado, después de su expulsión del Paraíso". Ese es el lugar más sagrado de todo el Islam. Dondequiera que los mahometanos se arrodillan para orar, lo hacen con el rostro vuelto a la dirección de La Meca y la Caaba, desde la cual, según creen, las oraciones pronunciadas al unísono y convergiendo desde todos los ángulos de la tierra suben verticalmente hasta los pies de Dios.
"Al ser proscritos del Paraíso, Adán y Eva quedaron separados. Doscientos años recorrieron la tierra en busca el uno del otro, sin descansar jamás, hasta que los cielos se conmovieron ante tanto amor. Y aquí se reunieron. Eva, desde esta montaña, divisó a lo lejos a Adán que se aproximaba".
Fue en Mina, escenario final de la peregrinación, donde Abraham hizo los preparativos para el sacrificio de su hijo (Génesis, XXII), pero por intercesión divina un carnero fue enviado para reemplazar al muchacho.
Mina es también el lugar de los sacrificios. Cerca de 150,000 ovejas fueron inmoladas, y mientras la vida se escapaba de sus rotas gargantas, el vaho pesado y dulzón de la sangre apestaba la atmósfera del desierto.
Una semana después me hallaba en Nueva York. Había sido testigo del rito religioso más antiguo de la tierra, un rito que es millares de años anterior a la religión que lo adoptó.
(Condensado del "Saturday Evening Post")
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