domingo, 21 de mayo de 2017

CANCIÓN DE SIR RICHARD / Rudyard KIPLING


ANTES de ser amante, yo partí con mi duque
para Inglaterra, en busca de feudos y de tierras,
pero ahora este juego no es el mismo que antes
porque ahora Inglaterra su cautivo me ha hecho.

Antes tuve caballo, tuve escudo y bandera
y, siendo puro y libre, corazón de muchacho;
pero ahora yo canto de otro modo distinto
porque ahora Inglaterra su cautivo me ha hecho.

Y mi padre, que aguarda, asomado en su torre,
noticias de mi nave que por el mar le lleguen,
recordará, sin duda, sus años de muchacho…
Decidle que Inglaterra su cautivo me ha hecho.

Y mi madre, que vive tranquila en la morada
que guía y que gobierna mi padre con astucia,
recordará, sin duda, su virginal potencia…
decidles que el camino que siguen no es el mío…
Decidles que Inglaterra su cautivo me ha hecho.

Y mi hermano, que en la ciudad de Ruán se encuentra
y es todo un avispado y picaresco paje,
conocerá el dolor y la angustia algún día…
Decidles que Inglaterra su cautivo me ha hecho.

A mi pequeña hermana, que aguarda mi regreso
entre los agradables huertos de Normandía
decidle que es ya el tiempo de las bodas tempranas…
Decidles que Inglaterra su cautivo me ha hecho.

A aquellos camaradas de camino y de lucha,
que vienen desdeñosos arqueando las cejas,
decidles que el camino que siguen no es el mío…
Decidles que Inglaterra su cautivo me ha hecho.

Majestades y príncipes y barones gloriosos
y caballeros todos, y también capitanes,
escuchadme un momento antes de censurarme,
sabiendo que Inglaterra su cautivo me ha hecho.

Igual que fue medida la fuerza del gran hombre,
hay dos cosas que nunca podrán ser evitadas:
amar es la primera, y es morir la segunda...
Y amor en Inglaterra su cautivo me ha hecho.

DE  MI ÁLBUM





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