El centenario Distrito de Salpo se encuentra ubicado en la provincia de Otuzco y a 70 kilómetros aproximadamente de la ciudad de Trujillo, por su nueva carretera. Su nombre deriva de la palabra quechua "Challpu" que quiere decir "manotear o chapoletear, hacer sonar el agua"; manotear o chapoletear agua fue la primitiva modalidad de beneficiar los minerales de oro sirviéndose de los quimbaletes con propiedades químicas para separar el oro de los otros elementos metálicos.
Fue creado el 24 de diciembre de 1847 por el presidente de la República Gran Mariscal don Ramón Castilla y Marquezado, como comprensión de la provincia de Huamachuco. El mismo jefe del Estado el 25 de abril de 1861, al crear la provincia de Otuzco anexa Salpo, Lucma, Usquil y Sinsicap a esta nueva jurisdicción provincial.
En cuanto a la evolución histórica de este distrito las ruinas de "Hundor", "Cuidista", "Shitahuara", "Arcalles", "Shamana", etc nos hacen creer que fueron pueblos preincaicos los que habitaron esta región y por las semejanzas con las ruinas de Marca Huamachuco. Para la época incaica no existen mayores datos; sin embargo, se puede aseverar que las agrupaciones indígenas continuaron su vida en forma apacible y con influencia de la civilización incaica, como la pequeña agricultura y tal vez la minería, puesto que las entradas a las antiquísimas minas "La Merced" y "Carabamba" guardan características semejantes a los del trabajo incaico.
Corre la tradición que para el rescate de Atahualpa, Salpo contribuyó también con el oro de sus minas. Otros restos que nos indican desarrollo precolombino son: un canal, visible aún, que existe en el caserío de Pagash, que parte del río Naranjal y termina en una represa llamada la "Represa del Gentil", y andenes en la parte inferior de este canal; de igual manera en Plazapampa se distinguen los restos de un sistema de irrigación incaica.
También hacen suponer que los territorios del centenario distrito de entonces podrían haberse comunicado con los de la costa sirviéndose de varios caminos, uno de los cuales partía de Hundor, pasando por Cogón, Plazapampa, Quirihuac para llegar a la capital Chimú; otro sendero de Shulgón pasando por Chepén, El Cauro, Guayabito y Quirihuac.
Durante la Colonia era Curato o Doctrina que pertenecía al Corregimiento de Cajamarca y a la Provincia Menor de Huamachuco, provincia que había sido encomendada por el Virrey Luis de Velasco a don Juan de Avendaño y Gamboa soldado de Flandes y Nápoles. En esta época los territorios de Salpo se delimitaron según la tradición, en el tiempo que los españoles comenzaron a invadir los ayllus y fue en esa época que don Fernando Gamboa casóse con doña Juana Pizapinta, hija del cacique de Hundor.
En la época Republicana, es de mencionar por su importancia histórica al guerrillero Artemio Neyra, quien organizó una "pandilla" de carabineros en defensa de la Patria ante la invasión chilena; al saber que éstos iban a pasar por el camino del "Achupallar" con dirección a Huamachuco vía Chanchacap; a las alturas del "torno" por el lado occidental coloca galgas dispuestas a ser lanzadas en el momento dado; así fue cuando el grueso chileno, comenzaba a pasar en "fila india" por el angosto camino que entra a Cotra. Empezaron a lanzar los peñones, que a su paso arrasaban con todo, murieron gran cantidad de chilenos y acémilas como también las provisiones que se perdieron en el río. Por esto Salpo fue castigado con un fuerte "Cupo" por Gorostiaga. Este episodio de gran éxito, la historia no ha recogido su cabal significado.
SALPO, como tantos pueblos del Perú, además de esta rica historia, también ha contribuído con destacados hombres de bien en las distintas disciplinas del quehacer humano, resaltando entre otros Juan Alvarado Sánchez-Carrión, Juan Carhuayo Mendoza, Daniel Bocanegra Vereau, Claudio Edmundo Espejo Lizárraga, Julio Cruzado Zavala, Javier Haro Vereau, Francisco Pereda Calderón, Modesto Montoya Zavaleta, Víctor Julio Urtecho Villena, Gustavo Vereau, Manuel Alvarez Haro, Juan Paredes Carbonel, los hermanos Ulises y Wenceslao Calderón de la Cruz, los primos Saniel y Nelson Lozano Alvarado, Diómedes Rosario Peralta, Miguel Angel Rosario Peralta, Segundo Leiva González, Isidro Gutiérrez Alfaro, Carlos Gutiérrez; pero de manera preferente Pedro José Gonzalez Cueva, quien en 1938 expone en la Sociedad Geográfica del Perú "Fundamentos para la Creación de la Provincia de Salpo" y en el que se encuentran los postulados de crear provincias siguiendo los cauces de los ríos Jequetepeque, Chicama y Virú; ya son realidades las provincias de Chepén y Ascope faltando concretarse las de Salpo y Virú.
En la actualidad cuenta con 5 colegios secundarios: "Virgen de las Mercedes" de Salpo, "Virgen del Carmen" de Cochaya, "Gustavo Vega López" de Chepén y los de Bellavista y Pagash; 24 escuelas primarias y más de 7 centros de educación inicial. Locales propios de la Policía Nacional, Municipalidad, Centro de Salud y moderna construcción de la Iglesia. Sin embargo, todas estas edificaciones han sido hechas con puro esfuerzo salpino sin ninguna ayuda estatal o de otras instituciones, lo que es preocupante por cuanto todos los gobiernos olvidan a los pueblos serranos, y en el caso de Salpo se hace con exageración.
Al estar próximo el sesquicentenario de creación distrital sería conveniente conformar un Comité celebratorio y plantear ante el Parlamento de la República el justo reconocimiento a tan noble pueblo andino que tanto ha contribuido al erario nacional así como también al desarrollo de otros pueblos.
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