martes, 6 de octubre de 2015

"LAS HISTORIAS DE MI INFANCIA": EL CERDITO DE ORO / Javier CALDERÓN ÁVILA


Aflora espontáneamente un recuerdo de nuestra memoria. La madre de familia diariamente entraba al corral con el fin de ver el estado normal de los animales. De pronto, ve un extraño fenómeno en un rincón del corral: un cerdito de color amarillo –un bultito de oro macizo- salía de la tierra como si fuera una pequeña planta. El cerdito estaba, la mitad tapado y sólo las patitas se movían tratando de ser liberado. La madre de familia impresionada por el hallazgo de inmediato comunicó a su esposo lo que sucedía. La pareja se constituyó al lugar de la sorpresa y el cerdito estaba tal como ella lo había dejado. Ambos impresionados fuertemente observaban la escena. En ese momento tocaron la puerta principal de la casa. Los dos salieron con el fin de que el visitante viera y participara del extraño fenómeno.  Al abrir la puerta no existía ningún personaje. Regresaron al corral y no encontraron ya al tal cerdito; sólo las huellas, huellas que perduran a pesar de las lluvias de invierno.

Nota del editor: Este es un testimonio real de una experiencia sentida teniendo en mente la concepción de la “huaca”, el tesoro dado por el maligno a ciertas personas a cambio de… (la entrega del alma). Dicen, llegan a ser ricos pero tienen un triste final.

El esposo con una inteligencia emocional  ejemplar y difusiva  –que encierra el destino-  logró conseguir la forma de reaccionar  ante tal vicisitud de la vida como diciendo: "/A mí con chanchitos!" y así no se dejaron ilusionar por tal ofrecimiento. Tal vez lo más sorprendente es que el recuerdo de aquellos breves minutos era revivido una y otra vez en el transcurso de la vida hogareña sin cambio alguno como diciendo también: "/Qué fantásticos somos!"

MISTERIO
Comarca andina fue el pueblo que nací
Vivencias costumbristas de arraigo secular.
Aurora armoniosa de gravitación universal
Viento de horizontes que riman en el tiempo.

El destino infiere álgidos anhelos
Centella fulgurante que guía el destino.
La serenidad latente equilibra el corazón
Los recuerdos son escenas del destino.

El tiempo infinito irradia dinamismo
La historia es una madeja de puntos fragantes.
El misterio sublima el espacio
La luz y la oscuridad coordinan el futuro.

La angustia temeraria implica el pavor
La atmósfera tangible late con fragor.
El aire de la furia es sonido espeluznante
El diablo misterioso astilla el alma.

La huaca es un tesoro que finge ser vivo
El cerdito maniatado por el espíritu
Un hueste misterioso insistía la opresión
Se congela el alma y lacera el corazón.

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