sábado, 14 de enero de 2017

"EL REINO AHORA": Cap. 23 UNA NOCHE EN LA ÓPERA / Tony PEREDA



   En las recámaras de la Reina, Alysse sirve el desayuno a la Reina Beatriz. Alyssee se da cuenta de que la mirada de la Reina refleja tristeza. Alysse le pregunta si hay algo en qué pueda ayudarla. La Reina dice que ella cree que el hijo que espera está afectando su estado de ánimo.

   En uno de los salones, Columbio se reúne con Janice, Milun, Papier, Flere y Pedro.
   “¿Y esta reunión no podía realizarse al mediodía?”, bosteza Papier.
 Columbio lo mira con mala cara.
   “Si realmente te interesara lo que…”
   “Basta, dejen de discutir”. Flere frunce el ceño.
 Columbio baja la mirada. Janice se preocupa.
   “Conozco esa mirada. ¿Ocurre algo malo?”, pregunta Janice.
   “Yo …Yo…”, murmura Columbio.
 Milun se acerca a Columbio.
   “¡Habla!”
 Un momento de silencio. Todos observan a Columbio.
   “Debo informarles que el Rey ha decidido detener todas las donaciones”.
   “¿Ah…cómo?”, parpadea Pedro.
 Todos quedan sorprendidos.
   “Estoy seguro que existe una razón del por qué”, dice Flere.
   “El Monseñor… probablemente”. Milun asiente con la cabeza.
   “Si el Rey está ciego, debes encontrar una manera de abrirle los ojos”, grita Papier.
   “Es tan fácil decirlo”, responde Columbio.
   “Sé que la Reina nos ayudará”, Janice dice con un tono de calma.
   “Al parecer todo esto fue idea de la Reina”, dice Columbio.
 Janice baja la mirada.

   En los apartamentos del Monseñor, el Duque felicita al Monseñor. El Monseñor dice que Columbio debe estar muy enojado con el Rey. El Duque dice que con el tiempo Columbio explotará y eso es lo que necesitan para deshacerse de él, para siempre.

   En las recámaras de la Reina, Janice y Flere piden a la Reina que trate de convencer al Rey de autorizar las donaciones nuevamente. Alysse los mira, sorprendida. La Reina les dice que ella sabe que quieren ayudar, pero existen otras maneras de lidiar con la situación económica del reino. Flere dice que muchos aldeanos se sentirán decepcionados. La Reina baja la mirada.

   Afuera de la Iglesia La Madre de Todos, los aldeanos esperan en línea para recibir las donaciones. Arturo y los feligreses distribuyen lo que les queda de las donaciones. Arturo les dice a los feligreses que está seguro que Columbio y los demás llegarán pronto. Milun y Pedro llegan en un carruaje. Milun se acerca a Arturo y le informa que el Rey ha decidido detener las donaciones. Arturo se queda pasmado.

   Papier ingresa en los apartamentos del Rey y el Rey Aidan le pide que tome asiento. El Rey comunica a Papier que ha decidido cancelar las actividades de donación, ya que existe una importante razón para ello. Papier lo mira sorprendido. El Rey entrega a Papier un manuscrito. Papier lo abre y observa ilustraciones de actuaciones y exposiciones realizadas en Frezzia hace muchos años. El Rey dice que Frezzia una vez fue la capital del arte, y él está seguro que podrían traer de vuelta todo eso al reino. Papier dice al Rey que es una buena idea. El Rey sonríe y dice a Papier que él sabe que es un artista y que posee mucha experiencia en comunicaciones, por lo tanto, desea ponerlo a cargo de la planificación. Papier asiente con la cabeza.

   Arturo se ubica delante de los aldeanos, y se disculpa con ellos por la espera. Arturo dice que cometió un error y no se dio cuenta que las donaciones solamente se programaron en forma temporal. Los aldeanos se miran entre ellos, sorprendidos. Uno de los aldeanos, lleno de ira, dice a Arturo que están seguros que el Rey y la Reina están detrás de todo esto. Otro aldeano dice que sólo quieren burlarse de ellos. Arturo baja la mirada y los aldeanos se marchan.

   Un niño que permanece en la línea llora. Milun se acerca y entrega al niño un par de monedas. El niño agradece a Milun. Milun dice a sí mismo que el Monseñor pagará por esto.

   Riot ingresa al Despacho de Columbio y dice a Columbio que él sabe que está muy molesto a causa de las donaciones. Columbio dice a Riot que a veces no entiende al Rey. Riot dice que se enteró que su hermano, Arturo, lo estaba ayudando. Columbio dice que la donación fue idea de Arturo. Riot dice que esto puede ser la causa de todo el problema. Columbio sonríe y dice que él sabe que otros están conspirando en contra de él. Riot dice que necesita hablar con su hermano. Columbio lo observa, muy sorprendido.

   En uno de los salones, Papier informa a Flere, Janice y Alysse que el Rey le ha asignado la planificación de eventos artísticos en el reino. Janice felicita a Papier. Flere dice que al Rey se le ocurrió una gran idea después de todo. Alysse, emocionada, pregunta a Papier si ya tiene algo en mente. Papier sonríe y dice que tiene muchas ideas, y por la tarde se reunirá con sus asistentes. Milun y Pedro ingresan. Flere les pregunta si Arturo fue capaz de controlar a los aldeanos. Milun dice que Arturo hizo lo que pudo; pero fue muy difícil para él explicarles, ya que ni Arturo entendía el motivo de la cancelación. Pedro dice que los aldeanos están furiosos con el Rey y la Reina.

   En la Iglesia La Madre de Todos, Arturo reza frente al altar. Arturo dice que no se dará por vencido. Elisa, una feligresa de corta estatura y largas trenzas, informa a Arturo que tiene visita. Arturo asiente con la cabeza. Riot se acerca y lo saluda. Arturo se sorprende al ver a su hermano.

   En uno de los salones, la Reina Beatriz agradece a Papier por ayudar al Rey con la planificación de las actividades. Papier dice que está contento de estar a cargo de ellas. Britta dice a Papier que ella sabe que hará que las actividades sean un éxito. Papier le sonríe.

   Columbio mira a Papier y dice a Milun que él no cree que Papier esté listo para llevar a cabo todas esas responsabilidades. Milun sonríe y dice que tal vez Papier les demuestre que están equivocados. Columbio dice que los aldeanos no necesitan arte; lo que necesitan son alimentos. Milun pide a Columbio que tenga paciencia.

   En la Iglesia, Arturo dice a Riot que es una sorpresa volver a verlo. Riot mira a su alrededor y dice que aunque es una construcción muy antigua, sigue siendo un hermoso lugar para vivir. Arturo die que la Iglesia ha estado abandonada desde que falleció el último sacerdote. Riot pregunta a Arturo si es cierto que decidió abandonar el Monasterio. Arturo sonríe y dice que a él le pidieron que se marche, y afortunadamente esta Iglesia no pertenece al Monasterio. Riot dice que está seguro que el Monasterio reclamará la Iglesia cuando se enteren. Arturo dice que la Iglesia pertenece a los aldeanos, y es mejor para él que no revele a nadie de su paradero. Riot dice a Arturo que está muy preocupado por él, y le pide que recuerde que Laura y su hijo, también son su familia. Arturo baja la mirada.

   Por la noche, Papier informa al Rey y a la Reina que ha planeado varios eventos, y uno de ellos es traer a la Ópera Ambulante a Frezzia. La Reina Beatriz se emociona y dice que la cantante principal Antonina, es de Crystland. Papier dice que ha enviado una carta al Director y espera que puedan hacer una parada en Frezzia. El Rey Aidan felicita a Papier. Janice y Flere lucen contentos con el logro de Papier. Columbio baja la cabeza.

   Unos días más tarde, Papier anuncia al Rey y a la Reina que la Ópera Ambulante ha llegado a Frezzia y realizará una función en la aldea, mañana. La Reina sonríe y dice que espera que esto cause alegría a los aldeanos.

   En uno de los pasillos, Alysse dice a Miilun que le alegra que la Ópera ha aceptado venir a Frezzia. Milun dice que ha ofrecido su ayuda para distribuir los afiches en la aldea. Alysse le pide que tenga cuidado.  Milun dice a Alysse que él realmente quiere pedir permiso a la Reina y así poder cortejarla. Alysse mira a Milun, sorprendida.

   Flere y Pedro se acercan con los afiches. Pedro abre uno de ellos y lo muestra a Milun y a Alysse. El afiche se titula: “Una mujer de otro reino”. Ellos observan la imagen de una mujer con un turbante besando a un caballero, mientras que una mujer rubia canta en el fondo. Pedro dice que espera que las actrices luzcan en verdad como se ven en el afiche. Alysse observa con atención a la imagen de la mujer del turbante. Milun pregunta a Alysse si ocurre algo malo. Alysse dice que estaba impresionada con el afiche.
 Flere y Pedro se marchan. Milun pregunta a Alysse si le gustaría ser su prometida. Alysse baja la mirada. Milun le pregunta si está prestando atención a sus palabras. Alysse se disculpa con él y dice que debe marcharse. Milun dice a Alysse que la ama, y está dispuesto a esperar su respuesta. Alysse afirma con la cabeza. Milun y Aalysse se besan.

   En la cocina, Sharize se acerca a la Señorita Pía y le informa que ha recibido una carta para ella. La Señorita Pía abre la carta y llora. Sharize le pregunta qué ocurre. La Señorita Pía dice que su padre está muy enfermo. Sharize abraza a la Señorita Pía y le dice que debería ir a visitarlo.

   En la aldea, Milun, Pedro y Flere colocan afiches en las paredes de las calles más concurridas. Los aldeanos observan con atención los afiches y dicen que la Ópera Ambulante no ha venido a Frezzia desde hace mucho tiempo. Arturo se acerca y se emociona al ver que los aldeanos están contentos con la Ópera. Flere entrega a Arturo las entradas. Arturo dice que los aldeanos estarán muy agradecidos. Milun observa el afiche y recuerda la reacción de Alysse cuando lo vio.

   En las recámaras de la Reina, Alysse organiza el armario de la Reina.
   “Debo vestir algo que impresione a los artistas”, dice la Reina.
   “No puede ser posible”, dice Alysse en voz baja.
 Alysse sostiene un turbante y recuerda la imagen del afiche.
 La Señorita Pía, con lágrimas en los ojos, ingresa.
   “Su Majestad, mi padre está muy enfermo. Debo solicitar de vuestro permiso para visitarlo”.
   “No te preocupes, querida. Puedes partir cuando gustes”.
   “Yo me haré cargo de todo”, dice Alysse.
   “Te lo agradezco”.
 Daugherty ingresa.
   “Su Majestad, señoritas, no hay ningún cochero disponible”.
   “¡Oh, se debe a los artistas!”, exclama la Reina.
   “Entonces, partiré en la mañana”.
   “Quizás Milun pueda ir contigo”, dice Alysse.
 La Señorita Pía baja la mirada.

   En uno de los salones, Papier agradece a Columbio por estar a cargo del alojamiento de los artistas en la aldea. Columbio dice que es su trabajo asegurar que los huéspedes disfruten de su visita. Papier dice a Columbio que a veces piensa que él no está de acuerdo con todas las actividades que ha planeado. Columbio dice a Papier que no debió involucrarse en nada de esto ya que él no sabe nada de política. Papier dice que él sabe que aún está molesto debido a que el Rey detuvo las donaciones, pero él está dando lo mejor de sí mismo, ya que ama el arte. Columbio dice a Papier que espera sepa lo que está haciendo. Columbio se marcha.
 Britta ingresa y dice a Papier que al parecer Columbio tiene problemas con todo el mundo. Papier dice a Britta que Columbio sólo quiere lo mejor para el reino. Britta dice a Papier que él es el mejor, y ella todavía no comprende por qué sigue soltero. Papier se ríe y dice que el matrimonio no es para él. Britta acaricia la cabeza de Papier y le dice que tal vez no ha conocido la persona correcta aún. El Duque ingresa y se sorprende al verlos.

   En el pasillo principal, Milun comunica a Daugherty y a Alysse que él está dispuesto a acompañar a la Señorita Pía a su aldea. Alysse le agradece. La Señorita Pía se acerca y Daugherty le informa que Milun la llevará donde sus padres. La Señorita Pía mira a Milun, sorprendida. Daugherty pide disculpas a la Señorita Pía por no ir con ella. La Señorita Pía dice a Daugherty que ella comprende. Daugherty le pide que tenga mucha fuerza cuando vea a su padre. La Señorita Pía lo abraza.

   Papier saluda al Duque y dice a Britta que irá a ver si los artistas ya han llegado. Papier se marcha. El Duque pregunta a Britta cuáles son sus intenciones con el estúpido Conde de Papier. Britta sonríe y dice que a ella siempre le gustaron los hombres que aman el arte. El Duque le dice que él la conoce bien. Britta dice que siempre es bueno tener un aliado. El Duque sonríe y dice que es una buena idea usar a Papier contra Columbio. Britta lo mira con desconfianza.

   En el patio inferior, la Señorita Pía ingresa en un carruaje. Alysse se acerca a Milun y le pide que tenga paciencia con la Señorita Pía. Milun dice que será un poco difícil, pero lo intentará. Alysse sonríe. Milun pregunta a Alysse si tuvo la oportunidad de pensar acerca de su propuesta. Alysse observa un grupo de carruajes y caballería llegando al Palacio. Alysse dice que la Ópera ha llegado. Milun dice a Alysse que hablarán a su regreso. Milun y Alysse se besan. La Señorita Pía los observa.

   En el Salón de los Nobles, Papier y un grupo de seis personas elegantemente vestidos, ingresan. El Rey y la Reina lucen emocionados al conocer a los artistas. Los artistas se arrodillan y saludan al Rey y a la Reina. Columbio, Flere, Pedro y Janice los observan.
   “Gracias por aceptar mi invitación”, dice el Rey.
   “¡Entonces, sin más preámbulos, les presento a la Ópera Ambulante!”, dice Papier.
 El Director, un hombre bajo de larga barba, da un paso adelante.
   “Soy Sergio”, dice él con una amplia sonrisa. “Y éstos son …”
 Sergio presenta a los principales artistas: la soprano Antonina, una elegante mujer de cabello rubio muy corto, Doña Olenka, una mujer gruesa, quien posee la voz de un barítono, el  tenor Jeremías, un hombre alto con una barriga pronunciada y una tímida sonrisa, el actor Benedetto, un hombre alto y apuesto, y finalmente a la actriz Caterina, una mujer muy atractiva, de mejillas hundidas, quien viste un turbante rojo.

   Escondiéndose detrás de una columna, Alysse observa con atención a Caterina.
   “Caterina, mi vieja amiga, finalmente logró su sueño”, dice Alysse.

   En el camino hacia la aldea de la Señorita Pía, Milun detiene el carruaje y alimenta a los caballos. La Señorita Pía se baja del carruaje y dice a Milun que le alegra que las cosas marchen bien entre Alysse y él. Milun sonríe. La Señorita Pía dice que ella sabe que él está aquí ya que Alysse se lo pidió. Milun dice que a veces le gusta tomar un poco de aire fresco. La Señorita Pía agradece a Milun por venir con ella. Milun asiente con la cabeza.

   En el Palacio, la soprano Antonina comunica a la Reina que ellos realizaron una actuación en Crystland hace unas semanas. La Reina, emocionada, dice que extraña a su reino. Antonina dice que su madre, la Reina de Crystland, es una gran mujer.
 Flere y Papier conversan con los otros artistas. Britta coquetea con el actor Benedetto. Janice se acerca a Columbio.
   “¿No te parecen todos tan encantadores?”, pregunta Janice.
   “No más que tú, cariño”.
 Janice sonríe.
   “Me alegro de que te agraden”.
   “Lo que en verdad importa es que logren agradar a los aldeanos”.
 Janice pide a Columbio que confíe en Papier, como Arturo lo hace.
 Columbio asiente con la cabeza.
 Caterina observa la decoración del Palacio y Alysse la llama por su nombre. Caterina se da vuelta y se sorprende al ver a Alysse en el Palacio. Alysse pide a Caterina que la siga.

   La Señorita Pía y Milun llegan a la aldea de Pratria, donde la Señorita Pía creció. Milun detiene a los caballos.
   “¿Estamos cerca?”
 La Señorita Pía se baja del carruaje.
   “Puedo caminar desde aquí”.
   “Espera, Iré contigo”.
 La Señorita Pía observa la entrada de una acogedora casa de piedra.
   “Nada ha cambiado”.
 Una anciana obesa abre la puerta y reconoce a la Señorita Pía. La Señorita abraza a su madre y le pregunta acerca de su padre. La madre de la Señorita Pía dice que su padre se siente mejor y cree que es porque él sabía que ella vendría a verlo.
 La Señorita Pía ingresa y ve a su padre, un anciano con los labios entreabiertos, acostado en una cama. La Señorita Pía le dice a su padre que le alegra saber que se está recuperando. El padre de la Señorita Pía tose y dice que se está poniendo viejo, pero se siente interiormente fuerte de verdad. Milun ingresa y saluda a los padres de la Señorita Pía. El padre de la Señorita Pía observa a Milun.
   “¿Es ese tu prometido?”, pregunta él.
 La Señorita Pía permanece en silencio.
   “Sí, Señor, su hija y yo nos amamos”, responde Milun.
 La Señorita Pía mira a Milun, muy sorprendida.

   En uno de los pasillos, Alysse y Caterina se abrazan.
   “No sabes cuánta alegría siento de verte convertida en cantante”.
   “Y yo nunca me hubiera imaginado que serías la Dama de honor de la Reina”, dice Caterina.
   “Es una larga historia”.
 Caterina da vuelta.
   “Tenemos mucho de qué hablar, pero…es importante que nadie se entere de mis orígenes”, dice Caterina.
 Alysse asiente con la cabeza.
   “No te preocupes. Entiendo muy bien cómo funcionan las cosas por aquí”.
 Caterina sonríe y toma la mano de Alysse.
   “No he tenido la oportunidad de visitar Bordania después de haberme marchado”.
   “Todos deben estar sorprendidos al saber que eres miembro de la Ópera más famosa”.
   “Créeme, no fue fácil. Pero la Ópera es como mi nuevo hogar”.
   “No sabes cuánto anhelo poder verte mañana actuar en el escenario”.
   “¿Me pregunto si ya te casaste?”, pregunta Caterina.
 Alysse sonríe y niega con la cabeza.
   “Ando con un Caballero de gran honor”.
   “Las cosas para mí son muy diferentes ahora. Un hombre diferente en cada pueblo”.
 Alysse se ríe. Britta se acerca.
   “¿Acaso esta criada es tu amiga?”, pregunta Britta.
 Caterina mira a Britta. Alysse baja la mirada.

   En la aldea de Pratria, la Señorita Pía se acerca a Milun.
   “¿Has perdido la cäbeza?”
   “¿Por qué?”
   “Jamás mentiría de esa manera a mi padre”.
   “Nunca es demasiado tarde”.
   “No tienes derecho alguno de hablar de esa manera”, grita la Señorita Pía.
   “Lo hice por ti”.
 La Señorita Pía mira a Milun, enfurecida.
   “Tus padres tienen derecho a saber que eres una mujer feliz”, añade MIlun.
   “Deja de meter la nariz donde no te incumbe”.
 Milun niega con la cabeza.
   “Abre los ojos. Tal vez eso es lo que tu padre necesita”.
 La Señorita Pía agacha la cabeza.
   “Pía, Señor Milun. La cena ya está servida”, grita la madre de la Señorita Pía.
   “Y si no puedes hacerlo por mí, deberías hacerlo por ellos”, dice Milun determinado.
   “Bueno… no tengo otra opción en este momento”.
   “Después de todo, conozco a alguien que está muy interesado en ti”.
 La Señorita Pía ensancha sus ojos.
   “¡El Capitán Daugherty!”
   “Daugherty y yo, somos sólo amigos”, explota la Señorita Pía.
   “¿Cómo puedes decir eso? Se ve que debajo de esa caparazón, hay una mujer que pide a gritos ser amada”.
 La Señorita Pía abofetea a Milun.

   En el Palacio, Caterina dice a Alysse que ella pensó que trabajaba para la Reina, no para una vieja pedante. Britta, furiosa, dice a Caterina que al parecer ella no sabe con quién se está metiendo. Caterina sonríe y dice que el linaje y los títulos no son importantes para un artista. Britta dice que hará que la expulsen de la Ópera  y de Frezzia cuando le informe a la Reina Beatriz de sus insultos. Britta se marcha. Caterina le grita a Britta diciéndole que no le teme. Alysse pide a Caterina mantener la calma. Caterina dice a Alysse que debe tener mucho cuidado con Britta. Alysse dice que todos en el Palacio ya saben cómo es ella. Caterina pregunta a Alysse dónde se encuentra ese Caballero que le roba sus sueños. Alysse dice que su nombre es Milun, pero por desgracia tuvo que viajar.

   Milun y la Señorita Pía se sientan en una pequeña mesa y la madre de la Señorita Pía les sirve la cena. Desde su cama, el padre de la Señorita Pía pregunta a Milun si por ser soldado se le hace difícil ver a menudo a su hija. La Señorita Pía casi se ahoga con la comida. Milun dice que siempre trata de dedicarle un tiempo para ella. El padre de la Señorita Pía dice que hace mucho tiempo su hermana le permitió visitar el Palacio, y él sabe que el Palacio es un lugar lleno de misterios. Milun y la Señorita Pía se ríen.

   Los artistas agradecen al Rey y a la Reina por la invitación. Caterina se acerca a la Reina y le dice que sus ojos nunca antes presenciaron a una mujer tan hermosa como ella. La Reina sonríe y agradece a Caterina. Britta pregunta a la Reina si sabía que Caterina y Alysse son amigas. La Reina, emocionada, pregunta a Caterina cómo es que se conocieron. Alysse dice que trabajó para la tía de Caterina y Caterina siempre le habló de su sueño de ser actriz. Caterina dice que ella siempre consideró a Alysse como una hermana. La Reina dice a Caterina que si gusta visitar a Alysse , siempre será bienvenida en el Palacio. Britta mira a Caterina con desdén.

   Más tarde, Milun se encuentra en el umbral de la casa de la Señorita Pía. Milun se dice a sí mismo que está seguro que Alysse también está interesado en él. La Señorita Pía observa a Milun desde su ventana y luego baja la mirada.

   En el Palacio, Britta sostiene una invitación a la Ópera Ambulante y dice que Alysse ni se imagina lo que tiene planeado para ella. Britta sonríe.

DE MI ÁLBUM


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