CARMEN MCRAE: Canto y piano (Nueva York,
8.4.1922-1994). Empezó a estudiar piano cuando era una niña, y debutó como cantante,
acompañándose al piano, durante los estudios superiores. Después de un tiempo
lejos de Nueva York trabajando como mecanógrafa, volvió a su ciudad natal hacia
1943, actuando en los locales nocturnos como pianista y cantante. Así empezó a frecuentar el
“Minton’s Playhouse”, el célebre club donde se celebraron las jam
sesions que dieron vida al be bop. Después de casarse con el baterista Kenny
Clarke, la cantante tuvo su primer contrato profesional en 1944, cuando fue
incluida en la bing band de Beny
Carter. Al año siguiente entró a formar parte de la orquesta de Count Basie,
pero los contratos con estos dos grandes músicos no le ayudaron demasiado a
salir del anonimato. Entre 1946 y 1947 fue la cantante de la orquesta de Mercer
Ellington. Con la big band del hijo
de Duke también debutó en las salas de grabación, realizando un disco con el
nombre de Carmen Clarke.
Entre los finales de los cuarenta y principios de los
cincuenta pasó una época de crisis, durante la cual estuvo varias veces a punto
de abandonar la actividad musical.
Después de actuar durante cierto tiempo como entertainer en el “Milton’s”, hacia 1953
el acordeonista Matthews la llamó para formar parte de su cuarteto, con lo cual
ocasión de grabar para dos pequeñas casas discográficas. Gracias a estos
discos, Carmen McRae, que mientras tanto se había divorciado de Clarke, obtuvo
fama entre los músicos, y su colaboración con el clarinetista Tonny Scott la
ayudó mucho para darse a conocer por la prensa especializada. En poco tiempo su
popularidad se fue consolidando, hasta llegar a ser nombrada “cantante del año”
en 1954, en el referéndum de una revista especializada. A partir de la mitad de
los años cincuenta su actividad ha sido muy intensa. Carmen ha participado
en numerosos conciertos en todos los
Estados, convirtiéndose en la favorita del público del festival de Monterrey.
Durante los años sesenta realizó algunas importantes grabaciones, como las que
hizo con el cuarteto de Dave Brubeck y la participación en The Real Ambassadors, un disco basado en el homónimo musical, que
reunía a personajes del calibre de Louis Armstrong, Dave Brubeck y el trío
vocal Hendricks, Lambert y Ross.
Considerada como una de las
grandes voces del jazz por su profundo sentido del blues y por su
característico timbre capaz de dar tensión a cualquier interpretación, después
de una afortunada gira en 1964, se convirtió en una de las vedettes más
cotizadas en Japón, donde últimamente ha grabado algunos discos. Hay que
recordar algunas excelentes interpretaciones suyas de “clásicos” del repertorio
de Billie Holiday, que para Carmen fue, al principio de su carrera, una gran
fuente de inspiración. Durante los últimos años ha seguido su actividad,
efectuando numerosas giras también por Europa, participando en algunos shows
televisivos de éxito y realizando numerosas grabaciones.
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